La música del Barroco se caracteriza por su estilo suntuoso, muy ornamentado, dramático y expresivo, logrando así manifestar la expresión de los sentimientos y los afectos.
La transmisión de emociones se organizaba a través de la Teoría de los Afectos y la Retórica. En las formas vocales la música se supedita a la poesía, reforzando los sentimientos ligados a la palabra.
Podemos afirmar que lo profano y lo sagrado se dan la mano; ha sido así durante siglos en la historia de la música, donde la sutil frontera era muy permeable.
En nuestro programa conviven arias de ópera de gran carga dramática con una obra religiosa, Nisi Dominus RV 608, motete para alto, cuerdas, viola de amor y continuo, compuesto en Venecia, en 1716. Se trata de una cantata de grandes dimensiones, obra de juventud.