El señor Robert es un "alma suspendida" : buena, bella, amable e ingenua.
Un ser inundado por una espera sin fin. Uno de esos vecinos que siempre saludan
y nunca causan problemas, de esas personas que pasan por el mundo
esperando, sin hacer ruído. Esperan que llegue el correo, esperan una llamada,
esperan el amor, esperan la notcia y la respuesta...
Esperan en la soledad de sus vidas mientras pasan los días, distraídos, indifirentes y, sin saberlos, esperan la muerte y el más allá.