EL HOMBRE, LA MUJER, así sin nombres propios, coinciden en un espacio que hace muchos años había dejado de ser lugar de culto religioso para convertirse en una suerte de sala para compañías de teatro experimental. Allí, entre los restos semidestrozados de ambas actividades encuentran la paz y el y el silencio que la vida ordinaria les niega.
Por otro lado, la diosa TYCHE ha querido "aparecerse" para enseñarles a abominar de la posverdad y la demagogia y recuperar el reconocimiento de la realidad, del presente.
LABERINTO: anatomía del presente es un thriller psicológico, una indagación sobre el lenguaje teatral: un lenguaje propio, lleno de poesía, creatividad y musicalidad, muy alejado de las propuestas actuales, aunque rebosante de atrevimiento y modernidad.