En esta relectura del mito, se propone reescribir la historia de manera que Eurídice sea la única protagonista y no necesite de ningún Orfeo para salvarse. La dramaturgia del propio mito se entrecruza con obra de ficción autobiográfica del artista; siendo así esta “Nueva Eurídice” la relatora de su huída de un infierno construido en la vivencia tóxica del amor romántico y sus consecuencias destructivas y de violencia psicológica.