Sara vive tranquilamente su apacible vida de estudiante de periodismo. Es liberal, colaboradora, feliz. Pero todo eso va a cambiar en un segundo. Su hermana Olga, fiscal, totalmente diferente a ella, comedida, introvertida, va a llegar pidiendo su ayuda. Mientras Olga le cuenta su gran problema, aparece de repente Mario, amigo de toda la vida. Mario se dedica a trapichear con drogas, y le debe una importante cantidad de dinero a unos matones, que le buscan. De repente, Sara ha de salvar la vida de los dos, y la suya propia.