Sobornos, enchufes, sobres, paraísos fiscales, dinero negro, saqueo de cajas de ahorros, recalificaciones... Todo esto, y mucho más, se puede ver en: “El Tesorero”, una comedia que retrata la España de la corrupción.
Basada libremente en el Caso Bárcenas, la obra cuenta el primer día en el gobierno de un nuevo ministro de Cultura, cuyo mayor interés es usar su puesto para hacer negocios, y buscarse un buen enchufe para cuando deje el gobierno.
Una sátira política que traslada a los espectadores a los despachos de los ministerios, para que puedan ver cómo se comportan nuestros políticos cuando las cámaras no les están enfocando y permitirle que se tome la revancha, que se ría de los políticos que se están riendo de él todos los días.