Reconstrucción

Deconstruir el cuerpo y reconstruirlo. Tres como si fuera uno. La metáfora que ha guiado este espectáculo es la búsqueda de la memoria. Pero no una memoria de lo pasado, no es ese objeto mental que de lo vivido elaboramos en el presente con la etiqueta de “recuerdo” y que acaba por convertirse en una carga. Un trabajo con las emociones, con lo que siente cada uno hoy, ahora, en su interior y en su relación con el exterior, con los demás y con los elementos de ese universo plástico y sonoro que lo envuelve. Que es también y sobre todo físico. Pues es en el cuerpo actual donde aparecen grabadas, a veces imperceptibles, las cicatrices; donde se concentra el bagaje adquirido, del mismo modo que en los cristales de la corteza terrestre se concentran las historias de todos los seres del planeta