La noche del 31 de Julio de 1944, el autor del cuento El Principito, Antoine de Saint-Exupéry, realiza una última gesta como héroe de guerra y es abatido por un avión nazi sobre la costa francesa que lo vio crecer. Su mujer, Consuelo, y su madre, Marie, ejes de la vida y de la literatura del escritor, esperan juntas en una habitación de hotel de Nueva York para saber si, con la de Antoine, han perdido también sus vidas. Antoine ha desaparecido igual que el pequeño niño de su cuento. Las dudas asaltan a ambas mujeres en la habitación neoyorquina. La espera se alarga aún unas horas. Las dos mujeres siguen pendientes del teléfono, más bien tensas y poco amistosas, mientras desgranan la vida de Antoine, un vuelo existencial lleno de accidentes, de aventuras y de contradicciones.