Equilibrio

La historia se mueve en postales o cuadros de una realidad que vive entre el exceso y las carencias. Como si de un turista se tratara, se han escogido aquellas postales que defienden o apuntan hechos concretos de la vida. Como recortes de un telediario pasando desde los caprichos a las necesidades más precarias.
En un vaivén entre el discurso coreográfico y el teatral, se presentan personas que hablan de las necesidades de afecto, de la necesidad de ser importante, de lo que les supone estar solos o acompañados, de ofucarse en lugares concretos, y de no parar de verlos todos, el que ríe y el que vive en el horror...
Enmarcado en un plano completamente estético y contado por mujeres, la obra muestra fotografías de lo que somos capaces de hacer por sentirnos en paz, tranquilos y en equilibrio.