El año 1868, la reina Isabel II llega a París, a su exilio. Le han echado del país, ¿por qué? ¿Por ser inmoral, y mujer? ¿Por ser incompetente, y mujer? O, ¿por ser mujer y gobernante de una sociedad machista? En París quiere olvidar de España y de su vida, pero no le dejan. Quiere olvidar de sus amantes y de su marido, olvidar de la política y de todo este crispación que la han rodeado, pero no es posible. Y mientras sus sirvientes planean su pequeña revolución, Isabel tiene que aguantar su más espantosa pesadilla - tiene que compartir la casa con su madre.