El sueño de una noche de verano

la Compañía de Espectáculos La Tarasca pretende consolidar el lenguaje de la danza como una manifestación genuina y con toda probabilidad “entendible” por el gran público. De esta forma y a partir de sus anteriores experiencias, nos proponen un espectáculo que utilizando el lenguaje corporal, integre a los intérpretes bajo un esquema propio de un montaje teatral. Es decir, a partir del planteamientos teatrales (personajes, protagonistas-antagonistas, conflictos, incidentes, etc...) los bailarines irán creando sus personajes para en una última fase definir el movimiento como coreografía propiamente dicha.

El espectáculo está basado en la famosa comedia de Shakespeare “Midsummer night’s dream”.Con este espectáculo La Tarasca quiere mantener abierto el telón al arte más antiguo de la historia, mostrando cuanta grandeza guarda el silencio de las palabras no dichas. Es ese mundo invisible que guardamos en nosotros mismos. El misterio del espacio interior confundido con el espacio de lugares cotidianos.

El hilo conductor que entrelaza estas tres historias es llevado por Puck, un duende que —con sus hechizos torpes— confunde a las parejas y las entrecruza.

Así, los personajes de la fábula se corresponderán con los del texto original, aunque dependiendo de su procedencia o naturaleza serán encarnados por los diferentes integrantes de la compañía: Teseo, Hermia, Lisandro, Demetrio, Egeo y Elena serán encarnados por los bailarines de la compañía; Oberón, Titania y Puck por bailarines que introducirán textos determinados; los artesanos serán encarnados por los músicos de la compañía, haciendo un paralelismo entre la Tragedia de Píramo y Tisbe con el ensayo de su partitura musical; y por último, las hadas estarán encarnadas por cantantes, que también tendrán la función de conducirnos hacia el nivel más lírico de la historia.

La Tarasca ha elegido esta obra de Shakespeare porque los conceptos vertidos en ellas nos conducen a descubrirla esencia del ser humano:

El amor, y más aún, el error amoroso y la transformación de éste en deseo, forman parte de la vida cotidiana de cualquier ser humano. La eliminación del texto dramático y su adaptación para la coreografía no pierde por ello la capacidad evocadora y metafórica de su lenguaje, más bien al contrario, rescatando los pasajes del texto que puedan interesar tanto para seguir el argumento del espectáculo como para destacar valores determinados, inherentes en el texto de Shakespeare.

Así se nos ofrece un juego dramático inicial que se corresponde con un juego escénico en el que la danza es la protagonista, utilizando elementos textuales y musicales que convierten la propuesta en un espectáculo total, atractivo, divertido, dinámico y fresco.

En cierta manera es la continuación de sus anteriores espectáculos dirigidos al público más joven. El objetivo de la propuesta es contar una historia que guíe a los espectadores como hilo dorado de Ariadna por el laberinto sugerente de la danza contemporánea.